Cogida en el baño [ Relato Erotico ]

Un día llegó a casa una chica de Guatemala para ayudar en los quehaceres del hogar, ella tenía 18 años y desde que la vi me llamó la atención, tenía un rostro bonito y unas buenas tetas y sobre todo unas nalgas exorbitantes. Ella también cuidaba a mis sobrinos.

Cada día tenía muchas ganas de sentirla, me la comía con la mirada, ella al parecer se daba cuenta de eso porque me sonreía cada vez que la miraba con pasión.

Muchas veces al llegar a casa por la tarde ella salía del baño recién bañada con una toalla muy corta, casi enseñándome su buena figura, esto sucedió muchas veces, yo trate de insinuármela varias veces pero no me atrevía por temor al que dirán en mi casa si se enteran que la paraba molestando.

Hasta que un día entre al baño apurado para lavarme, mis sobrinos estaban en el comedor que queda cerca al baño y grande fue mi sorpresa cuando la vi desnuda saliendo de bañarse, no me resistí y la abrace para besarla, ella dejo caer la toalla, cerré la puerta del baño y también la comencé a acariciar por todo el cuerpo, toque sus tetas las cuales eran mas grandes de lo que me imaginaba, mordí sus pezones y sentí su excitación, toque su vagina y estaba mojada como preparada para recibir mi polla.

Ella me bajo los pantalones y me la comenzó a chupar por largo rato, cuando la tenia bien dura la quise penetrar pero ella me dijo por la vagina no, por temor a quedar embarazada fue entonces cuando se dio vuelta y se apoyo a la pared mostrándome sus enormes nalgas, yo no desperdicie la oportunidad y de lo excitado que estaba puse en mis dedos vaselina y comencé a frotar su ano, luego me pegue a ella y la penetre totalmente, ella comenzó a gemir sin importar que mis sobrinos la escucharan, comencé a darle con mas fuerza y a ella le gustaba porque quería que le de mas y que no termine nunca, después de varios minutos eyacule en su ano manchándole sus nalgas.

Luego ella se cubrió con la toalla, salió del baño complacida por lo sucedido y se dirigió a su cuarto, yo me quede impresionado y satisfecho por lo que había sucedido.

Mis sobrinos luego preguntaron que había pasado porque la escucharon a la chica soltar muchos quejidos.